2.2. Concepto de psicología individual
Con el término "individual" Adler entendía
que el individuo es indivisible, que la mente humana era un todo
holístico, dirigido por unos fines o metas. Actualmente, los adlerianos
prefieren usar el término de "teleoanálisis" (Dreikurs, 1969)
para referirse a que toda la actividad mental humana está
dirigida a fines o metas, y que la psicología adleriana se dedica al estudio de
los fines o metas humanas.
-------->In-dividuus (latín): El
individuo es una unidad indivisible.
------->Teleoanálisis: Análisis del "télos", palabra griega que significa fin. |
2.3. Diferencias básicas con el
psicoanálisis
Adler desde 1902 a 1910 formó parte del movimiento
psicoanalítico de Freud, hasta que se separó de este para fundar su psicología
individual . Los motivos de tal separación están en su desacuerdo con Freud
sobre la naturaleza de la mente y del inconsciente. En 1931, Adler enumeraba
las diferencias entre la psicología individual y el psicoanálisis (Adler, 1931)
: (1) Rechazo de la concepción sexual del inconsciente por aceptación
del inconsciente como actitudes o metas hacia la superioridad, (2)
reinterpretación del complejo de Edipo como una lucha de poder del
niño con su padre,(3) mayor importancia a la educación e influencias
familiares en la formación del carácter frente a la concepción más
biologicista de los instintos de Freud , (4) reinterpretación del narcisismo
como basado en el complejo de inferioridad y su compensación, (5)
reinterpretaciones del deseo de muerte, complejo de castración, ideal, etc como
apaños creativos. La diferencia básica para Adler con el psicoanálisis
estriba en una concepción diferente de la naturaleza humana.
Freud parte de la suposición de que el hombre por naturaleza tiende a satisfacer
sus deseos, y que a menudo choca con la cultura como impedimento a
esta satisfacción. La psicología individual en su primera fase teórica parte de
la concepción de la falta o limitación del ser humano y los intentos de
compensación de estas limitaciones; intentos que cuando son ajenos al interés
social-cooperación ,generan trastorno mental . Cuando el sujeto intenta, a
menudo de manera inconsciente, imponerse a los otros mediante la lucha de
poder, está abocado al sufrimiento emocional. Posteriormente Adler, en su
segunda teoría, propone la importancia del sentido de la vida, es decir
de darle significado a la misma, como interés primordial de la vida humana.
Respecto a los sueños,
mientras que para Freud expresaban de manera simbólica los deseos
inconscientes, para Adler son un intento de resolver un problema presente,
intento guiado por el plan inconsciente del estilo de vida, que supone un
autoengaño al sentido de cooperación.
Estas diferencias son aún mayores cuando
la psicología de Adler incorpora a su concepción motivacional inicial
(compensación de limitaciones) la filosofía cognitiva y constructivista de Hans
Vaihinger. El ser humano esta guiado por construcciones de significados
dirigidos a fines.
2. 4. La filosofia de Aristóteles
Phyllis Bottome a quién Adler le encargó escribiera su
biografía ("Alfred Adler. Apóstol de la libertad", Miracle, 1952);
destaca que la formación filosófica de Adler estuvo muy influida por la
filosofía aristotélica. Es muy importante destacar esto; pues a pesar de la
evolución de su pensamiento, y la posterior influencia de otros filósofos
(Vaihinger y Bergson, sobretodo), siempre conservó como pilares básicos de su
psicología aspectos fundamentales de la aristotélica
¿Pero en qué aspectos podemos descubrir esta
influencias?. Veámoslos sucintamente:
1º-"El hombre como ser social": Para
entender el comportamiento humano es necesario hacerlo en el terreno de las
relaciones interpersonales, mas que en sus aspectos intrapsíquicos. Los
problemas humanos son sobretodo, problemas de relación entre las personas (en
las llamadas "tareas de la vida": amor-pareja, trabajo y relaciones
sociales). Además la salud psicológica está relacionada con el desarrollo del
"interés social o sentimiento de comunidad" (ver punto 2.9)
2º-"El principio holístico": El
todo es mas que la suma de las partes. Para Aristóteles cuerpo y alma (psique)
forman parte de la unidad humana. Adler recoge este legado en su concepto de
"Estilo de Vida" como unidad de la personalidad total en sus
aspectos físicos, cognitivos, afectivos, conductuales y motivacionales; y en la
unidad de consciente e inconsciente, como expresiones de la personalidad total.
La persona no puede ser diseccionada y analizada en partes, sino en su
totalidad, dado que todos sus actos y expresiones responden a su misma unidad,
dirigidas por su meta final (principio teleológico).
3º-"El principio teleológico":
Aristóteles distinguió entre el principio causal (el porqué de las cosas que
pasan) y último principio (el propósito y finalidad de las cosas que pasan).
Adler entiende que para comprender las acciones humanas hay que atender a la
finalidad o propósito de las mismas, a su intención.
2.5. La filosofía de Seneca
La influencia de este filósofo hispánico recae sobre
todo sobre la concepción cognitiva de la subjetividad en la teoría
adleriana. Para Séneca, al igual que para Adler, las acciones de las
personas dependen de "la opinión subjetiva" que se hacen
de las cosas y de los acontecimientos de la vida. Para entender a una
persona es necesario conocer sus opiniones sobre los asuntos de su vida
(su "lógica privada" y sus "esquemas aperceptivos"
como dice Adler). Pero a diferencia de los cognitivista s posteriores (Ellis,
Beck, Guidano, etc), esas opiniones (creencias, esquemas, constructos..)
dependen a su vez del Estilo de Vida de la Persona, guiado por su meta finalista.
2.6. La filosofía de Vaihinger
Hans Vaihinger (1852-1933) filósofo kantiano
alemán y su obra "Filosofía del como si" (1911) es
considerado por los adlerianos como pensador de gran influencia en la
psicología individual. Este filósofo, como todos los kantianos, estaban
interesados en la teoría del conocimiento; en como y para qué conoce el
hombre.
La cognición en su teoría filosófica
tiene una función eminentemente práctica. Se orienta a la acción con la
finalidad de asegurar la vida humana. Con ese fin utiliza las "ficciones"
que son construcciones mentales del sujeto para ordenar su experiencia. Estas
ficciones tienen una utilidad subjetiva, independientemente de su valor de
verdad o falsedad.
Desde este punto se ha considerado a Vaihinger
como un filósofo constructivista y aún relativista. Sin embargo, este filósofo
llega a distinguir dos tipos de cognición: la basada en hipótesis que
se puede comprobar probabilísticamente mediante pruebas de realidad, y las
ficciones que obedecen a un fin práctico independientemente de su criterio
de verificación. Por lo tanto su concepción es tanto constructivista como
racio-empírica, según el tipo de conocimiento a que nos refiramos.
Algunas lecturas de Vaihinger le presentan sin
embargo como un constructivista radical, poniendo en tela de juicio todas las
teorías del conocimiento como ficciones sujetas a utilidad, ya que la
"realidad" si existe, nunca puede ser conocida en si misma.
Sin embargo, como se ha apuntado, este filósofo
distingue entre hipótesis (verificables) y ficciones (no verificables).
Titze (1979) afirma: "Se infiere de esto, según Vaihinger, que la
hipótesis está sujeta a leyes metodológicas del principio de probabilidad, en
tanto que la ficción sigue el principio de utilidad y conveniencia
práctica".
Es curioso como un mismo filósofo puede
ser interpretado de distinta manera (Titze, 1979; Oberts,1998)
Precisamente Adler, tendrá en cuenta como las
"ficciones" están en la base de la cognición neurótica y de otros
trastornos mentales, como formas de construir la experiencia mediante
una "lógica privada" ajena al "sentido común".
2.7.2 . La filosofía de Bergson
En la segunda fase del
desarrollo de la psicología adleriana, aproximadamente desde 1927 hasta 1937
(año de la muerte de Adler), el pensamiento adleriano está muy influenciado por
la filosofía del francés Henrí Bergson (1851-1941) .
Para Bergson la realidad fundamental es el impulso vital (elán vital) a través de la evolución creadora (evolution creatice). El desenvolvimiento de la vida no obedece a mecanismos preestablecidos ni a una teoría casualista y determinista, sino a un proceso creativo continuo, que en los humanos es guiado por la intuición, la conciencia, el lenguaje y la inteligencia que le permite un número casi ilimitado de respuestas ante las condiciones de su vida . Es decir la dirección de una persona en su vida no está determinada de antemano por ninguna circunstancia biológica, social o psicológica de tipo determinista, sino por la elección que hace está en sus circunstancias.
Precisamente Adler reconoce este punto de vista en su concepto de "fuerza creadora" ”. Define la energía productiva mediante la que el individuo realiza su propio Estilo de Vida o personalidad en contacto con las experiencias de su vida y el mundo circundante. Inicialmente, Adler relaciona la fuerza creadora con la etapa infantil de la vida, para explicar como la formación del Estilo de Vida no es una reacción pasiva del sujeto ante la influencia ambiental y la herencia. El niño es un sujeto activo ante las influencias externas y hereditarias, crea en cierto modo su propio Estilo de Vida.
Para Bergson la realidad fundamental es el impulso vital (elán vital) a través de la evolución creadora (evolution creatice). El desenvolvimiento de la vida no obedece a mecanismos preestablecidos ni a una teoría casualista y determinista, sino a un proceso creativo continuo, que en los humanos es guiado por la intuición, la conciencia, el lenguaje y la inteligencia que le permite un número casi ilimitado de respuestas ante las condiciones de su vida . Es decir la dirección de una persona en su vida no está determinada de antemano por ninguna circunstancia biológica, social o psicológica de tipo determinista, sino por la elección que hace está en sus circunstancias.
Precisamente Adler reconoce este punto de vista en su concepto de "fuerza creadora" ”. Define la energía productiva mediante la que el individuo realiza su propio Estilo de Vida o personalidad en contacto con las experiencias de su vida y el mundo circundante. Inicialmente, Adler relaciona la fuerza creadora con la etapa infantil de la vida, para explicar como la formación del Estilo de Vida no es una reacción pasiva del sujeto ante la influencia ambiental y la herencia. El niño es un sujeto activo ante las influencias externas y hereditarias, crea en cierto modo su propio Estilo de Vida.
- Adler, en uno de sus últimos artículos, “El progreso de la humanidad”, de 1937, dota la fuerza creadora, y por lo tanto el margen de libertad y anti determinismo de una fuerza aún mayor, pues defiende la mayor modificabilidad del Estilo de Vida, aún en los adultos en interacción con el ambiente. Con esta nueva, y última perspectiva, la Psicología Adleriana se zafa bastante del genetismo infantil que había defendido, y que de alguna manera chocaba con la idea de totalidad, al primar más la etapa infantil que el resto de la vida. Aunque la influencia de la etapa infantil seguía siendo importante, las experiencias posteriores y la fuerza creadora del sujeto (su capacidad de reconstruir su vida) podían cambiarse en etapas posteriores de la vida.
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