lunes, 30 de agosto de 2021

PARA QUÉ ES IMPORTANTE QUE LA TERAPIA ADLERIANA SE BASE EN LA EVIDENCIA (Sperry y Sperry, 2017)




En nuestro número inaugural como nuevos editores (Sperry & Sperry, 2017), uno de nuestros compromisos fue educar y defender la terapia Adlerian para lograr un estatus basado en evidencia. Este número especial es la primera encarnación de ese compromiso.

 

Este número especial consta de cuatro partes. La primera parte es un ensayo de Len Sperry titulado: "Lograr un estatus basado en la evidencia para la terapia adleriana: por qué es necesaria y cómo lograrla". Comienza definiendo los distintos términos basados ​​en evidencia. Luego describe por qué la terapia adleriana debe perseguir un estado basado en la evidencia. Por último, describe cómo se puede lograr esto mediante el desarrollo de manuales de tratamiento y la planificación e implementación de ensayos clínicos.

 

La segunda parte consta de seis respuestas detalladas al artículo de Len Sperry por siete adlerianos prominentes. Cada autor proporciona información sobre la necesidad de lograr un estado basado en la evidencia para la terapia adleriana y todos articulan el valor, los desafíos y la controversia de comenzar el esfuerzo de investigación riguroso articulado por Len Sperry. Las seis respuestas destacan la necesidad de que la terapia adleriana se una a la proverbial "tabla basada en la evidencia" de la práctica clínica contemporánea.

 

La tercera parte se titula "Más evidencia para la terapia adleriana basada en evidencia: responder a los respondedores", por Len Sperry. Él responde y comenta sobre el apoyo y las críticas de cada uno de los que respondieron al plan para estudiar de cerca la terapia adleriana. También destaca la importancia de ir más allá de las resistencias a que la terapia adleriana se base en la evidencia y centre los esfuerzos en lograr un estado basado en la evidencia en un futuro muy cercano.

 

La cuarta parte se titula: "Terapia adleriana centrada en patrones: un manual de tratamiento" por Len Sperry y Vassilia Binensztok. Como sugiere el nombre, el artículo es un manual de tratamiento desarrollado para implementar ensayos clínicos y capacitar a los terapeutas que participarán en esos ensayos, lo que presumiblemente conducirá a la designación de un tratamiento basado en evidencia. [Fin de la página 245] enfatiza una forma de terapia adleriana, la terapia centrada en patrones adlerianos, y se enfoca en el tratamiento de la depresión mayor en una terapia estructurada de diez sesiones. Este manual también se puede utilizar en programas de formación de posgrado y talleres para médicos en ejercicio.

 

En resumen, este número tiene como objetivo llamar a los profesionales, investigadores y educadores de Adler para que den un paso fuera de sus zonas de confort y se aseguren de que la terapia de Adler siga siendo no solo una terapia que puede construir sobre el bienestar y reducir el sufrimiento humano, sino también una terapia que resultará eficaz a través del proceso de validación científica. [Fin de la página 246]

Bibliografía:

 

     Sperry, J., & Sperry, L. (2017). Extending Individual Psychology theory and practice through empirical and scholarly research. Journal of Individual Psychology, 73(3), 171–172.

 

 

     Fuente original del artículo en inglés aquí:

                      https://muse.jhu.edu/article/702559

 



UN ESTUDIO SOBRE LA EFECTIVIDAD DE LA TERAPIA DE GRUPO ADLERIANA CON PADRES DE ESTUDIANTES CON PROBLEMAS EMOCIONALES.2020

 



RESUMEN EN ESPAÑOL DEL ARTÍCULO ORIGINAL:


El presente estudio tuvo como objetivo investigar la efectividad del asesoramiento adleriano grupal sobre la salud mental y el ajuste social de los padres de estudiantes con problemas emocionales

El método de investigación fue cuasi-experimental con pretest-postest y un grupo de control. La población estadística de este estudio incluyó a todos los padres de estudiantes en Kermanshah durante 2018-2019. El método de muestreo fue aleatorio por conglomerados. La muestra incluyó a 60 padres de estudiantes durante el año académico 2018 a 2019. Fueron divididos en tres grupos de 20 individuos (dos grupos experimentales y un grupo control con 20 individuos). 

A cada uno de los grupos experimentales se le asignó un asesoramiento grupal con adleriano o bien un grupo de tipo cognitivo-conductual llamado enfoque de comportamiento emocional (REB) durante 2 horas en 8 sesiones. Las Escala del cuestionario de salud general de Goldberg y Hiller (1979) y la Escala de ajuste de Bell (1961) se utilizaron para recopilar los datos. 

Los resultados mostraron que la consejería adleriana fue eficaz para aumentar la salud mental y la adaptación social.

 Resumen del programa de las 8 sesiones (traducción del original)

Sesión preliminar:

Realización de una prueba previa, proporcionando información y orientación necesarias, familiarizándose con el propósito de los programas de entrenamiento mental, preparar a los miembros para el programa.

Sesión uno:

Comprensión de los objetivos del grupo, proporcionar información y establecer una relación íntima entre sus miembros, presentando al consultor,  explicando el proceso de reuniones y principios de confidencialidad, y participación de los miembros en la fecha y hora anunciadas,  familiarización de los miembros del grupo entre sí.

Sesión dos:

Comprender el estilo de vida de los miembros y el papel de la persona y las actitudes de los padres en la formación de la familiaridad (estilo educativo)  con el estilo de vida y los factores que influyen en la configuración de esa tarea en la sesión.

Sesión tres:

Explorar el dinamismo individual en torno al sistema familiar, orden de nacimiento y recuerdos tempranos, comprender los roles de los padres y los miembros de la familia, actitudes sobre la formación del estilo de vida de los miembros y la reescritura sus primeros recuerdos desde una nueva perspectiva.

Sesión Cuatro:

Examen, reconocimiento y desafío  de creencias con asignaciones  conductuales en relación a su estilo de vida y prioridades de personalidad.

Quinta sesión:

Evaluación de la dinámica individual, reconocimiento y desafío de sus  errores básicos (actitudes o creencias disfuncionales), comprensión de los errores fundamentales en el pensamiento y su relación con el estilo de vida actual, pidiendo a los miembros que descubrir sus errores fundamentales considerando sus recuerdos iniciales.

Sesión seis:

Fomentar el autoconocimiento y la percepción, mediante el desafío de su c lógica privada, reevaluando las metas de la vida con el fin de reforzar el interés social.

Sesión Siete:

Identificación de metas y obstáculos para sus logros, el auto-estímulo y el atrevimiento a cambiar el propósito de nuestro comportamiento voluntario, practicando el tema de estímulo y una tarea práctica.

Octava Sesión:

Resumiendo los temas y materias de las sesiones  anteriores y reorientación para proporcionar los conocimientos, revisando los temas previos de la sesión, el sistema familiar, recuerdos, prioridades de personalidad, errores fundamentales,  tareas de la vida, orden de nacimiento, determinación y orientación a metas. 

Artículo completo en inglés aquí:  Descargar aquí

The Effectiveness of Adlerian Group Counseling on Mental Health and Social Adjustment of Parents. Khodabakhsh Jalilian , Hassan Amiri , Mokhtar Arefi  y Karim Afsharinia4 (2020)

Nota personal: (Juan José Ruiz Sánchez)

En los últimos años el movimiento de Terapias Basadas en la Evidencia ha tomado un importante auge ya que se trata de que las personas reciban métodos eficaces para sus dificultades que vayan un paso por delante de las preferencias teóricas de sus proponentes. La Terapia Adleriana quedó durante muchos años relegada a las presentaciones clínicas de casos sin contrastar sus resultados. Desde hace unos años, aunque tímidamente, se inicia un acercamiento a los estudios basados en la evidencia, algo sin duda de agradecer para quienes reciben este tipo de terapia ya que garantiza que estos procedimientos pueden ser de ayuda contrastada.

Es de destacar también que muchos de los estudios basados en la evidencia de muchas modalidades grupales no se originan tanto en ambientes occidentales o norteamericanos (casi siempre centrados en la dominancia de las terapias individuales) sino que son de origen asiático, con especial predominancia de los psicólogos de Iran, tanto en nuevas terapias cognitivas-conductuales (por ejemplo Terapia de Aceptación y Compromiso de Grupo) como en este caso de la terapia de grupo aderiana. Esto cuestiona la excesiva centralidad de los relatos psicoterapéuticos de origen anglo-sajón o europeo en la construcción y prácticas de las terapias psicológicas.

Mención aparte es la cuestión de los "ingredientes activos" que hacen efectivas a diferentes modalidades de terapias de grupos; que según se haga una u otra lectura teórica pueden ser comunes a todas estas. Para el autor de estas líneas lo fundamental y común habría que buscarlo tanto en la teoría de Yalom de los factores comunes (destacando tres: "Universalidad-este problema que tengo es similar a los que presentan mis compañeros de grupo, yo no soy un bicho raro"; "Altruismo-Aquí nos ayudamos los unos a los otros" y "Cohesión Grupal-Aquí vamos todos a un objetivo similar y nos agrada formar parte de este grupo"; lo que equivale a estimular el "Interés Social" adleriano. Otro aspecto esencial para el autor de estas líneas son los procesos de aprendizaje operante de interacción entre los miembros del grupo que les permite darse cuenta (discriminar/insight para otros) del efecto de su conducta en terceros y aprender nuevas formas de relación prosocial y más valiosas para ellos en base a estas experiencias.

lunes, 26 de julio de 2021

HOJA DE RUTA PARA LA PSICOTERAPIA ADLERIANA BREVE (Ruiz, 2021)

La psicoterapia adleriana breve es una modalidad de terapia bien adaptada a contextos públicos de mucha demanda y espacios de sesiones de unos 30 minutos por persona. Aquí presento la hoja de "psicoeducación" llamada HOJA DE RUTA del modelo de trabajo que se mantiene en todas las sesiones y que se desarrolla en unas 10 sesiones máximo aproximadamente. Es el enfoque que más utilizo en mi trabajo junto a las terapias de tercera generación contextuales-contextuales. Deseo les sea de ayuda. Al final de cada sesión se realiza un resumen con el consultante de los aspectos más valiosos de cada sesión y sus progresos.

Estoy por elaborar igualmente una metáfora que represente esta forma de trabajo de manera similar a como se hace desde la terapia ACT de Hayes, y que represente este movimiento en ruta de la vida, las dificultades que aparecen en el camino y como nos podemos atascar desde nuestra forma de conducirnos en ellas y cómo seguir adelante con más coraje/valor y cooperación con otros. Ya hice una metáfora similar de ACT que se puede adaptar a esta terapia; ya que ambas coinciden (entre muchos más aspectos) en la intencionalidad o funcionalidad de comportamiento humano, el para qué de nuestras acciones.

Este enfoque adleriano en contexto público ya fue presentado conjuntamente en 2007 por Ruiz y Oberst (2007); y aquí se presenta la hoja de ruta actualizada 14 años después.






Bibliografía:


Ruiz, J. J., & Oberst, U. (2007). La psicoterapia adleriana breve: un modelo de intervención para los contextos de la salud mental pública. Revista De Psicoterapia18(69), 35-55.


sábado, 13 de febrero de 2021

BREVES APUNTES SOBRE LA RELACIÓN TERAPÉUTICA DESDE UNA PERSPECTIVA CONDUCTUAL-ADLERIANA (Ruiz, 2021)

 





Breves apuntes sobre la relación terapéutica desde una perspectiva conductual-adleriana (Ruiz, 2021)

 

Desde las terapias de tercera generación conductuales-contextuales, en especial desde la Psicoterapia Analítica Funcional (FAP) de Kohlenberg y Tsai (Kohlenbeg y Tsai, 1991) se plantea que las personas que están en terapia psicológica y que presentan “problemas del Yo” (Rasgos o trastornos de personalidad) presentan repertorios de conductas de relación interpersonal aprendidos y bajo control estimular público más que privado llevándoles a actuar en esas relaciones alejados del contacto con sus propias necesidades o deseos y más en función de lo que otros dicen o hacen que de su propia estimulación privada.

Esto se relacionaría más con el llamado clúster de personalidad desde la psicología de rasgos tipo B (patrones de inestabilidad) y C (patrones neuróticos de ansiedad-evitación) y menos con el cluster A (patrones excéntricos) donde puede darse un exceso de control e hiperreflexividad de contacto con la estimulación privada y evitación o aversión a la estimulación de terceros o interpersonal.

De este enfoque conductual de la FAP  junto a la Terapia Dialéctica conductual (DBT) de Marsa Linehan (Linehan,1995) se derivan planteamientos terapéuticos precisos y prácticos de cómo es deseable que actúen los terapeutas ante determinadas conductas de sus clientes, pero sin caer en el recetario sino más en función de lo que sucede en el aquí y ahora (“mindfulness en contacto con el presente”);  planteamientos que van contando progresivamente con evidencias contrastadas más allá de las puras especulaciones que han llevado a la psicología lejos de la ciencia y a ser más una actividad de reflexión de  sillón que de investigación.  

En esto las terapias cognitivas-conductuales son la punta de lanza actual de lo más científico de la psicología en el campo de la salud mental, sin duda.

La FAP establece una serie de cuestiones relevantes para determinar si los problemas relatados en la vida diaria se están presentando aquí y ahora en la misma relación terapéutica (conductas clínicamente relevantes tipo I); si los progresos relatados de la vida diaria igualmente se presentan en el aquí y ahora de esta relación (conductas clínicamente relevantes tipo II) y las interpretaciones del cliente sobre esos problemas/progresos (conductas clínicamente relevantes tipo III). Igualmente ofrece unas reglas orientativas para actuar ante estas conductas (Regla I-Observar las conductas clínicamente relevantes tipo I y II; Regla II-Evocar o provocar las conductas clínicamente relevantes I y II aquí y ahora para intervenir en ellas, Regla III-Reforzar los progresos de las conducta clínicamente relevante en el aquí y ahora, Regla IV-Intercambiar con el cliente como nos afectamos aquí y ahora mutuamente y si esos nos aleja o acerca a los objetivos de cambio de las CCR2 y Regla V-Ofrecer interpretaciones funcionales graduales a moldear para que el cliente aprenda a transferir los cambios de dentro de la sesión a su vida diaria).

Sin embargo las terapias conductuales contextuales o cognitivas-conductuales de tercera generación a pesar de estos avances no presentan una teoría estructurada y acabada del todo por ahora de  lo que llamamos personalidad y sus trastornos;  aunque están en ello y avanzan a pasos agigantados (Kohlenberg y Tsai, 2001, Valero y Ferro, 2017) lo que sin duda afinará aún más la calidad y efectividad de sus propuestas en estas problemáticas.

De otro lado la psicoterapia adleriana cuenta con una larga tradición clínica e interesantes propuestas sobre la personalidad entendida como “Estilo de Vida” (Adler,2000, 2003; Ruiz, Oberst y Quesada,2006; Ruiz, 2018) que habitualmente se presentan al público como terapia afín a las propuestas más  psicodinámicas, cognitivistas y constructivistas; cuando desde nuestra perspectiva está más cerca del conductismo de lo que aparentemente les parece a muchos de sus practicantes que siguen anclados en ver errónea y desinformadamenté  al conductismo como una psicología mecanicista E-R.

A pesar de su larga tradición clínica el planteamiento adleriano  tiene interesantes propuestas aún para el propio conductismo (Pratt, 1985; Pérez Álvarez, 2013; Ruiz, 2015) y a su vez este de manera recíproca para los adlerianos; aunque  ambos se suelen ignorar e ir a lo suyo. 

Es cierto que los adlerianos carecen habitualmente de la tradición investigadora de los conductistas pero también es cierto de que su experiencia clínica no es irrelevante ni sus planteamientos conceptuales. De hecho esto ha sido reconocido sistemáticamente por conductistas destacados como es el caso de Marino Pérez Álvarez (2013).

Volviendo al tema de la relación terapéutica tanto conductistas como adlerianos son coincidentes de que la conducta de los clientes tienen una función o finalidad, un para que, sean o no conscientes de ello. Esto no es de extrañar dada la fuente filosófica común  aristotélica de la que ambas se nutren (las cuatro causas aristotélicas). 

Siguiendo a Rudolf Dreikurs,  un  adleriano muy conocido en el plano educativo y los problemas psicológicos en niños/adolescentes, que plantea entender que motiva a los niños a portarse mal desde el impacto emocional que tienen sus conductas en sus allegados y su planteamiento de las 4 metas (fines o funciones en este caso);  y trasladando estas hipótesis a la relación terapéutica con los adultos podemos establecer que cuando un cliente presenta determinadas conductas problemáticas en consulta (las ccr1 de la FAP) lo hace porque eso tiene unas funciones o fines en su persona en determinadas circunstancias de su vida en relación con otras personas, en este caso con el/a terapeuta; funciones aprendidas y reforzadas a lo largo de su historia personal y contextos actuales.

Averiguar esas funciones puede ser esclarecido usando el análisis funcional del intercambio verbal y no verbal del aquí y ahora ente terapeuta y cliente momento a momento (análisis funcional en vivo no solo de cuestionarios o registros externos)  siguiendo la principal herramienta de análisis e intervención conductista.

También puede hipotetizar adlerianamente su finalidad o función desde cómo afecta al terapeuta lo que aquí y ahora está sucediendo. El terapeuta ¿se siente a menudo enfadado y cansado con las conductas del cliente? y tendente a expresar molestia a este, pues puede que la función sea llamar la atención para que el cliente se sienta importante (ATENCIÓN). ¿Se siente a menudo herido por las palabras y acciones del cliente y tentado a enfadarse por ello con este? (VENGANZA), pues puede que el cliente busque vengarse de este o (o transfiera esa función en este) para sentirse satisfecho en la salvaguarda de su yo/autoestima. ¿Se siente retado a mostrar la cliente que él/ella es quién dirige la terapia y no este?;(PODER). ¿Se siente impotente e indefenso sin saber qué hacer ante las ccr1 del cliente en consulta?, pues puede que el cliente busque la retirada o evitación de cualquier esfuerzo que percibe imposible para no hacer aún mayor la herida a su estima (RETIRADA-IMPOTENCIA).

Una vez hipotetizada esa función (véase la afinidad con la regla IV de la FAP) el/la terapeuta la puede devolver (metacomunicar desde otra perspectiva como la terapia cognitiva interpersonal de Safran y Segal, 1990) y comprobar su efecto sobre la relación en marcha.

Podemos criticar que el planteamiento de Dreikurs se restringa tan solo a 4 metas o funciones, dada la variedad humana. Pero aquí lo relevante no es tanto si son 4 o X fines, metas o funciones, sino partir de la finalidad o función de esas conductas en contextos relacionales y no como productos de una avería interna en la cabeza sea mental o biológica (salvo problema neurológico contrastado, claro).

Un planteamiento más extenso de las afinidades conductuales y adlerianas desde las 4 causas aristotélicas  y el concepto de Estilo de Vida adleriano como operante organizadora de la persona a lo largo de su vida y sus potenciales implicaciones terapéuticas  está expuesto en nuestra obra “Psicoterapia Conductual Adleriana” de 2015.

Creemos igualmente que un intercambio teórico-práctico entre concepciones afines filosóficamente de sus proponentes como el caso de las terapias de tercera generación, los adlerianos, los psicólogos existenciales y  los psicoanalistas interpersonales/relacionales puede enriquecer a los distintos terapeutas, aunque cada uno prefiera su propia concepción (Ruiz,2013)

Ya existe algún precedente de esto como la entrevista del conductista  Marino Pérez en una prestigiosa revista psicoanalítica (Pérez  Álvarez, 2012).

Para hacer esto sin embargo hay que partir de una premisa que no siempre va a ser compartida por todos: "Nadie tiene respuesta para todo"; aunque haya mejores y peores propuestas en el campo de la psicoterapia y el autor de estas líneas prefiera las suyas como ha quedado expuesta en esta entrada.

Bibliografía para profundizar en el tema:

-Adler, A. (2000). El sentido de la vida. Madrid: Ahimsa.

-Adler, A. & Brett, Colin (Comp.) (2003). Comprender la vida. Barcelona: Paidós Ibérica

-Kohlenberg, R. J. y Tsai, M. (1991). Functional Analytic Psychotherapy: A guide for creating intense and curative therapeutic relationships. Nueva York: Plenum (Traducción al español en editorial PSara, 2021)

-Kohlenberg, R. J. y Tsai, M. (2001). Hablo, luego existo: Una aproximación conductual para entender los problemas del yo. Escritos de Psicología. 2001, 5. Pp. 58-62

-Linehan, M. (1995). Comprendiendo el Trastorno límite de la personalidad: Manual sobre el enfoque dialéctico. New York: Guilford Press.

-Ferro, R., y Valero, L. (2017). Hipótesis transdiagnóstica desde la Psicoterapia  Analítica Funcional: La formación del Yo y sus problemas. Revista Brasileira de Terapia Comportamental e Cognitiva. Volume XIX no 3, 145-165

-Pérez Álvarez, M. (2012). Entrevista a Marino Pérez Álvarez. El conductista radical (I y II). Temas de Psicoanálisis

https://www.temasdepsicoanalisis.org/2012/12/29/entrevista-a-marino-perez-alvarez-el-conductista-radical-i/

https://www.temasdepsicoanalisis.org/2012/12/28/entrevista-a-marino-perez-alvarez-el-conductista-radical-ii/

-Pérez Álvarez, M. (2013). Contingencia y drama. La psicología según el conductismo. Minerva Ediciones, Madrid.

-Pratt, A.B (1985). Adlerian psychology as an intuitive operant system. The Behavior Analyst, 8(1), 39-51 (Sping)

-Ruiz, J.J.; Oberst, U.E., y Quesada, A.M. (2006). Estilos de Vida: El sentido y el equilibrio según la psicología de Alfred Adler. Paidós, Barcelona

-Ruiz, J.J. (2013). Transferencia y contratransferencia. Del Psicoanálisis a la Psicoterapia Analítica Funcional. Realitas| Vol. 1| N°. 2| Jul-Dic| 2013. Pp.52-58

-Ruiz, J.J. (2015). Psicoterapia conductual adleriana. Lulú Ediciones.

-Safran, J.D.; y Segal, Z.V. (1990). El proceso interpersonal en la terapia cognitiva. Paidós.